Franz Liszt (1811-1886) fue un incansable viajero por Europa. Mucho de este peregrinar tuvo que ver cuando vivía en Paris, con su escandalosa unión con una condesa seis años mayor que él, casada con un potentado 20 años mayor. La unión, contra toda costumbre les obligó a una forzada peregrinación europea por Suiza e Italia, verían la luz sus Años de peregrinaje, una obra maestra compuesta por tres ciclos de piezas de mediana duración inspiradas en Suiza, Italia y el sentimiento religioso de la madurez vital.
En lo musical fue el pianista técnicamente más avanzado de su época, un genio con un estilo propio bien definido cuando has hecho el oído a su música. Y los Años de Peregrinaje de Liszt (en el original francés, Années de Pèlerinage) son una auténtica obra de arte que no se ve afectada por el paso de los años.
Ahora bien, salvo el primer ciclo (Suiza) que es amigable y se ajusta a los patrones del romanticismo musical, los ciclos segundo (Italia) y tercero, son más áridos para el que se esté iniciando en la música clásica y/o en Liszt. En particular, el Tercer Año de Peregrinaje es una obra de madurez compleja y técnicamente exigente.
Sigue leyendo para saber más sobre esta obra y el contexto en el que se compuso, que fue en sucesivas entregas, a lo largo de la vida de Franz Liszt.
Marie d´Agoult: Paris 1833
Liszt fue un joven alto, enjuto y guapo que con veinte años se codeaba por los salones aristocráticos de Paris.
Una de las más serias admiradoras del músico fue Marie Catherine Sophie de Flavigny, conocida como Marie d´Agoult (1805-1876), escritora y amante al mismo tiempo.
Conoció al austro-húngaro en un salón de Paris en 1833 y quedó prendada por el joven de 22 años. Aunque seis años más joven, se enamoró locamente y no dudó en divorciarse de su marido, el Conde d´Agoult.
Divorciarse de un opulento Conde en aquella época, una mujer de la alta sociedad, seis años mayor que un joven pianista sin mucho recorrido, debió ser muy duro por lo que la pareja no tuvo más remedio que huir de París en busca del anonimato.
En su compañía, un joven Franz de 25 años consiguió la plaza de director de clase de piano en el Conservatorio de Ginebra. Y desde esa posición recorrió salas de concierto grandes y pequeñas por Suiza entre los años 1835 y 1837 y posteriormente por Italia (entre 1837 y 1839). Este paso por Suiza quedaría reflejado posteriormente en el primer Año de Peregrinaje, dedicado a Suiza (S. 160).
La relación duró 11 años, durante los cuales, la pareja dio vida a tres hijos, Blandine Liszt Ollivier (1835), Cosima Liszt Ollivier (1837) y Daniel Liszt Ollivier (1839).
En lo intelectual, mantuvieron una estrecha relación con Frédéric Chopin y George Sand. De hecho, la escritora recomendó a Marie la escritura, cosa que hizo con el pseudónimo de Daniel Stern.
La propia Marie d´Agoult escribió lo siguiente en su diario sobre su musical compañero:
"Cuando se sienta ante el teclado, libre de preocupación, su genio creativo reina libremente. Su belleza alcanza un grado superior de nobleza solo apreciable por quienes escuchan su música. Su palidez aumenta, sus aletas nasales se ensanchan y sus labios tiemblan nerviosos, imponiéndose su mirada orgullosa que ni busca ni cuestiona nada más: él ordena y manda".
Posteriormente, entre 1837 y 1839, y tras una corta estancia de vuelta en París, la pareja viajaría por Italia, primero en el Lago Como y después por Venecia. Y de ahí nacerían los Libros II y III de sus Años de Peregrinaje.
A finales de los años 30, tras tener a su tercer hijo Daniel, la pareja se disolvió. El encanto y la admiración iniciales se habían esfumado, y Marie d´Agoult volvió a Paris donde logró volver con su familia y heredó una fortuna.
Album d´un voyageur
Listz escribió sus primeras impresiones musicales sobre estas itinerancias por Suiza e Italia en 1841 bajo el nombre "Album d´un voyageur" (Diario de un viajero) de 1841.
Se trataba de 19 piezas musicales inspiradas en sus viajes y sus lecturas de la Biblia, de Platón, de Locke, Byron o Víctor Hugo además de Lamartine y Chateaubriand.
Sin embargo, entrada la década de 1850, instalado en Weimar como Hoffkapellmeister, e insatisfecho con su calidad musical, escribió a su editor para que retirara de la circulación la partitura a la espera de una revisión completa.
Y esto motivó la publicación de su primer álbum, Années de Pèlerinage S.160.